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sábado, 29 de abril de 2017

Trabajadores de Zest


Fabricantes de calzados llevan sus inquietudes ante el gobierno municipal


El Intendente Hernán Ralinqueo junto al Director de Desarrollo PYME de la Municipal Maximiliano Wesner recibió el pasado miércoles 26 de Abril a representantes del taller de calzado textil Zest. Dialogaron acerca de la coyuntura económica nacional, cómo afecta a 25 de Mayo y a la industria del calzado. Zest es de las primeras iniciativas locales para la fabricación de calzado y mantenimiento de la fuente laboral luego de la caída de las grandes marcas en la década del noventa.


Los trabajadores del calzado pusieron a los funcionarios al tanto de la situación laboral por la que atraviesan, donde mencionaron que existe una menor producción y manifestaron que el mayor costo que deben afrontar es el alquiler del lugar donde producen. Al respecto de este tema, el Intendente aseguró que desde el Gobierno Municipal se analizará cómo pueden colaborar en este asunto para que puedan seguir funcionando de manera asociativa, no se disuelva la sociedad y puedan seguir produciendo en equipo.

Asimismo, dialogaron acerca de alternativas de comercialización. Ralinqueo y Wesner explicaron que ante la proliferación de ferias regionales, los trabajadores de este taller pueden participar en ellas.

Además, pusieron a disposición el área de Prensa y Comunicación para el asesoramiento y orientación en el armado de una Página de Facebook para el taller de calzado textil.

El rubro del calzado de manera industrial se remonta en 25 de Mayo a los años 80, cuando llegó por aquí la emblemática Adidas, por gestiones realizadas desde el municipio ante Antonio Alegre, por entonces presidente del Club Boca Junios y un empresario muy fuerte, propietario también de tierras en el distrito.

La caída de la industria como efecto de las importaciones que surgieron abiertamente con el proceso neo liberal iniciado con la llegada de Carlos Menem al poder generaron que durante la década de los 90, el rubro calzado se destruyera, regenerándose con mucho esfuerzo por la necesidad de los operarios de mantener sus fuentes de trabajo, por lo que de esa necesidad más que por la vocación, se fueron convirtiendo en cuanta propistas, tallereristas, dando lugar entre otras cosas a cooperativas de trabajo y producción.

Zest surge de esa necesidad y de ese esfuerzo. Pasó malos y buenos momentos y ha logrado llegar hasta este tiempo donde una vez más, la amenaza de las importaciones sin límites, la imposibilidad de competir con mercados productivos a gran escala y con regímenes casi esclavistas, inundan de productos las tiendas de todo el país.

El gobierno municipal se ha mostrado sensible a esta situación y ha comprometido ante los representantes de uno de estos talleres, ya que existen otros emprendimientos similares en 25 de Mayo, todo el apoyo a su alcance para aportar a la continuidad de esta iniciativa.

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